El amor hay que tomárselo un poco a broma también.
Hoy puede ser un buen día para recomendar esta serie, parte de algo tan sencillo como la búsqueda del amor, después de finalizar una larga relación cuando ya se es treintañero. ¡Un mundo plagado de aventuras!
Seguramente por eso es la serie más favorita del mapache actualmente, porque se reconoce en muchas escenas por no decir que en todas, aunque lo cuenten todo de la manera más exagerada del mundo es la serie más realista que ha visto.
Situaciones tan normales como darte cuenta de que te siguen, decirle a tu pareja que confíe en ti y empezáis a correr, después de una corta persecución con explosiones te frenan en seco con un golpe en el cuello y resulta que es tu padre para invitarte a cenar con la familia porque tu madre quiere conocerla.
La mecánica es muy sencilla, situaciones normales en contextos totalmente disparatados que me pillan siempre desprevenido y me dan directamente en el sitio de la risa…
Que tu ex empiece a salir con Hitler, cuando vuelves al mercado y las primeras cagadas, cuando vuelves a salir y todo el mundo es el rey de la fiesta y tú un inoperante social, cuando encuentras a alguien, cuando vuelves a encontrar a alguien esta vez de verdad, cuando entras en la rutina…
La vida en general pero con muchas más risas.
¡Qué duro es encontrar el amor, sobre todo con esa sensación de que se te acaba el tiempo! Menos mal que hay series como esta para poder llevarlo mejor.